Hallazgo

El objetivo de esta sección es dar a conocer piezas de valor histórico que constituyen el fondo patrimonial de la BNM a la vez que una invitación a consultarlas. No sólo se trata de encontrar el texto que ha quedado descansando, a la espera de una nueva consulta. También de regresar al que alguna vez ya fue interpelado a la luz de nuevas lecturas, otras preguntas, renovadas interpretaciones.

Entre las operaciones aritméticas y la sastrería

“Hace tiempo que me preocupa el descuido con que se mira en nuestros países la enseñanza de la mujer en lo que podríamos llamar la ciencia del hogar, y la carencia que hay de obras á propósito para instruirla en cuanto á ella concierne, para satisfacer las necesidades de la vida práctica diaria (…) Es cierto que la enseñanza de la mujer toma mayor importancia cada día, que á las jóvenes se las prepara más y mejor para la vida intelectual; pero no lo es menos que á esa enseñanza no acompaña generalmente aquella que ha de instruirlas en los quehaceres domésticos, en el gobierno y manejo de la casa, en el cuidado de los niños y en cuanto á la mujer atañe, como hija, como esposa y como madre”

Hoy presentamos “Economía e higiene doméstica” escrito por la Profesora Florencia Atkinson, el Doctor Juan García Purón y los señores Francisco Sellén y Eduardo Molina, publicado por D. Appleton and Company en 1888 y en su sexta edición, en 1912, “arreglada para el uso de la familia en general y para texto en las escuelas y colegios de señoritas”

Esa ciencia llamada Economía Doméstica

“… el arte de manejar, dirigir ó gobernar la casa y la familia sin perder ó malgastar tiempo, trabajo ni dinero”

Al tomar decisión sobre cada acción, se estará pensando en un bien práctico como objeto final de cada labor y todo tendrá su recompensa, por ejemplo, “al desempeñar el paladar la parte que le corresponde en la obra de alimentar nuestro cuerpo (…) o cuando llevamos á cabo un acto caritativo, sentimos una sensación interior que nada puede igualar” Pero no olvidar que es un error convertir en mira los placeres asociados a los deberes, esos será “simplemente una cosa accesoria”, como “dar gusto al paladar sin cuidarse de si conviene ó no á la nutrición”

Del aseo y la limpieza

“Cada acto ó trabajo ú ocupación produce más o menos suciedad en la persona, y esta suciedad, en lo que concierne á la superficie del cuerpo, sólo puede desaparecer lavándose”

La importancia de lavarse con frecuencia y atención todo el cuerpo, se entenderá mejor si se conocen algunas de las funciones de la piel, que no es sólo una gran cobertura para el cuerpo, también es un “gran excretorio” desde el que se expelen , alterados por procesos internos restos de alimentos y bebidas. Para que la piel pueda realizar esta tarea, “se halla provista de pequeños tubos respiratorios ó canales que parten de lo interior y terminan en la superficie del cuerpo. La longitud total de estos tubos, glándulas ó canales se calcula en cerca de treinta millas” Las terminaciones de esos canales se llenan continuamente de materia usada e inútil en estado sólido o semi fluido que se la hace desaparecer lavándose o bañandose. “Esto no quiere decir que tomemos diariamente un baño de inmersión, aunque es muy recomendable, pero excepto en las grandes ciudades abundantemente surtidas de agua por medio de acueductos, hay pocas casas privadas en que esto pueda conseguirse”. Pasarse rápidamente una esponja mojada y secarse, es lo que se requiere si se lo hace diariamente. Un pedazo de hule extendido puede suplir a la bañadera y en algunos países “existen buenos baños públicos á donde se puede ir con alguna frecuencia” El agua, además “es el más importante y universal de los agentes de purificación”, limpia por su acción mecánica, arrastrando la suciedad y las impurezas. Y cuando el agua no es suficiente, es preciso el auxilio de otros agentes como “los álcalis, la potasa, la sosa, el borax y el amoníaco, “cuerpos químicos muy poderosos que disuelven un gran número de diferentes compuestos, especialmente de origen animal o vegetal.

Del vestido y del calzado

“El objeto principal del vestido es cubrir y defender de las inclemencias atmosféricas á la persona; el segundo, es adornarla y embellecerla”.

Si el cuerpo no está abrigado, quedará expuesto a contraer enfermedades “y en ese caso, el espíritu sufrirá y las facultades intelectuales también se resentirán” Las prendas deberán estar confeccionadas con materiales adecuados, de modo que no ofrezcan inconvenientes a los movimientos y que se adapten a los cambios de estación. Los materiales habituales que el hombre usa para vestirse son “pieles, cueros, corteza y hojas de árboles, ó tejidos hechos de ellos, así como seda, lana, algodón e hilo. y “puede decirse que para la ropa interior, la seda es lo mejor, pero su gran coste impide que se la emplee mucho con ese objeto” Entre higiene y moda, no debiera haber contraindicaciones, “pero cuando la moda sanciona un vestido que en vez de amoldarse á la persona, requiere, por el contrario que los órganos vitales se amolden al traje, impidiendo de esta manera el ejercicio de sus funciones, entonces se ve obligado á levantar su voz para protestar enérgica, aunque tal vez inútilmente”

De qué más se ocupa esa ciencia llamada Economía Doméstica

“Debemos cultivar nuestras relaciones sociales hasta dónde puedan ser causa de felicidad domésticay engendren sentimientos de afecto y benevolencia entre vecinos y amigos; así como debemos ejercitarnos corporalmente y divertirnos, hasta donde sea útil para mantener el vigor intelectual y corporal”.

La limpieza requerirá del orden, del lavado, del planchado. Quitar las manchas será un desafío, pero antes, los modales para que estas no se produzcan. Cada ambiente de la casa tendrá sus particularidades de funcionamiento, la cocina, el modo de hace las compras, los adornos, subordinando lo bello a lo útil. Las buenas maneras considerarán el cuidado de los enfermos, de los niños, su educación, los ejercicios corporales, las diversiones y los deberes sociales.

Ubicación: Este libro puede consultarse en la Sala Americana -SC PLT 1882.

 

Ana Diamant

 

Material digitalizado Ver material digitalizado: “Economía e higiene doméstica”.

 

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