Queremos celebrar con este editorial los 24 años de gestión en la BNM que comenzó formalmente un 3 de mayo de 1993. Un sueño que interpretó un equipo interdisciplinario: el sueño sarmientino de construir un espacio de información y conocimiento, de lectura y prácticas públicas para que esta institución volviera a estar a disposición de los docentes y bibliotecarios escolares del país, junto con los demás actores de la comunidad educativa y del sistema educativo nacional. Un equipo que todavía está formado por muchos profesionales que se animaron a poner en valor la historia a través de vectores de innovación tecnológica, pedagógica y bibliotecológica, con el agregado de muchos otros partícipes de una ecuación de suma y resta de compromisos y aportes a través de estas décadas.
Así esta institución histórica ha tomado el desafío de construir una sociedad lectora inclusiva desde 1870, y en este último tramo, desde un modelo de políticas públicas sustentables en gestión de la información en el sistema educativo y para la ciudadanía lectora en general, ha partido desde la impronta fundadora de funcionarios, directores y equipos que han marcado con su sello las anteriores gestiones, memoria e historia que queda atesorada tanto en sus fondos preciados como en las acciones para preservarlos y difundirlos.
La BNM se erige hoy abarcando diferentes escenarios y lectores con sus roles paralelos de biblioteca nacional, biblioteca federal, biblioteca especializada y biblioteca pública. El modelo institucional construido se ha apoyado en vectores que han aportado a su sustentabilidad como organización pública.
Sus valores institucionales han sido consistentes con el compromiso real de su gente, la matriz institucional de conocimiento colectiva ha proporcionado la riqueza de enfoques que permite poder contar con la investigación continua que sustenta la innovación, la mirada hacia la estética y la calidad ha sido norte de los estilos y diálogos, las palabras y las imágenes y la satisfacción de nuestros lectores. Los horizontes nunca se quedaron inmóviles tanto para los pequeños y grandes proyectos.
Desde los primeros años de esta propuesta, dentro de un modelo de gestión organizacional pública original, se ha promovido una comunidad de aprendizaje con recursos humanos enriquecidos en el pensar y en el hacer que ha generado instancias de normalización técnico-bibliotecológica, que ha hecho de la mediación pedagógico- tecnológica un enfoque obligatorio para abordar las acciones y que ha generado un enfoque multiusuario siempre en sintonía con las expectativas dinámicas de los lectores.
Así, a través de este periodo en el diseño de políticas públicas para la gestión de la información y el conocimiento, la BNM ha extendido su órbita de acción hacia la demanda genuina que fue surgiendo desde las bibliotecas escolares y otras unidades de información del sistema educativo, a través de una agenda federal que ha incluido normativa, constitución de redes, gestión de proyectos, asistencia técnica y capacitación, publicaciones y contenidos, y en cuentros presenciales y virtuales para el diálogo y la innovación.
En un amplio espectro que comprende desde la llegada al territorio escolar y su comunidad, hasta su actuación en instituciones y agendas internacionales, la BNM quiere compartir y celebrar estos años de labor diaria en pos de su participación en la formación de lectores ávidos y reflexivos.
Agradecemos a todos los que forman este equipo inquieto y comprometido, a aquellos que tenemos en nuestra memoria, a los que participaron y luego buscaron nuevos rumbos, a los que generosamente aportaron su saber y hacer desde otros espacios, a todas las autoridades que siempre dieron a la BNM un lugar de privilegio en la políticas educativas nacionales y a todos los usuarios pasados, presentes y aquellos que están por venir: ellos son la razón para que se abran las pesadas puertas de roble todas las mañanas y que se prendan todas las pantallas para que la información confiable y transparente esté siempre lista.
Lic.Graciela Perrone
