Día para recordar los pequeños y grandes esfuerzos logrados: las generosidades de cuerpos y vidas , las tantas palabras escritas y habladas, cuya censura callo sus voces, las éticas de las acciones cotidianas y magnánimas y los liderazgos que abrieron nuevas oleadas de libertad, de respeto por el otro, de solidaridad y de compromiso con el bienestar de todos.
Día para abrir más bibliotecas y ganar más lectores, para reflexionar sobre el sentido de la vida compartida con nuestros congéneres. para tomar las responsabilidades necesarias e involucrarse en construir colectivamente nuevos paradigmas sociales y culturales que sigan tejiendo valores desde donde proyectar más caminos de inclusión y participación económica y cívica en paz y armonía.
Día de historias de padres y abuelos sobre memorias recientes y futuros promisorios. Día para expresar las emociones personales. Dia para preparar a las nuevas generaciones como artífices de nuevas ideas y custodios de los principios de la democracia en la globalidad vertiginosa del hoy.